Hanjin Shipping queda varada en las negociaciones.
La compañía surcoreana Hanjin Shipping, la mayor del país y séptima naviera de contenedores del mundo, se encuentra bloqueada en sus negociaciones de reducción de precios con los dueños de sus buques fletados en régimen de arrendamiento.
La compañía ha estado manteniendo contactos con los propietarios de las naves, pero estos no han aceptado esta intención de reducción de tarifas de una forma positiva y ahora mismo están negociaciones parece que no van a llegar a un buen puerto. Esto es un obstáculo mucho mayor de lo que parece, porque este acuerdo es una de las condiciones clave impuestas por los acreedores de la compañía para que esta evite la intervención judicial.
Esta situación contrasta con la de Hyundai Merchant, segunda compañía naviera del país, que sí que progresó en sus conversaciones con sus arrendatarios y consiguió el respaldo financiero que necesitaba. El problema con Hanjin Shipping es que el número de armadores con los que tiene que negociar es significativamente mayor, por lo que la presión que puede ejercer sobre ellos es menor que la de su rival y las conversaciones se antojan mucho más duras.
Además, la circunstancia de que uno de sus buques fue detenido en puerto recientemente en Richards Bay el 24 de Mayo, durante tres días, debido al impago de tasas y costes de fletamento, hace entender que la situación de la naviera está empeorando aún más.
A pesar de que el mes de mayo pasado los acreedores aceptaron el primer plan de reestructuración presentado por la compañía, este está sujeto y condicionado al compromiso total por todas las partes implicadas en el plan de auto rescate, y de momento una de ellas ya está poniendo trabas a un plan que de momento es únicamente un retraso de tres meses en todos los pagos de capital e intereses.